⚠️ SPOILER: “Marta y Fina: Sueños de Libertad (Capítulo 319) – Ese hombre se llevó la vida de mi hijo, no descansaré
En el capítulo 319 de Sueños de Libertad, se intensifican las tensiones entre Damián y Pedro, marcando un punto de no retorno en la búsqueda de justicia y venganza por parte del patriarca. La escena central gira en torno a una conversación privada entre Damián y su hijo Andrés, donde el dolor, la rabia y la determinación se entrelazan con revelaciones inquietantes.
Todo comienza con Andrés saludando a su padre y preguntándole si está estresado por el aumento de la producción en la empresa. Sin embargo, Damián desvía rápidamente el foco: su mente está ocupada por algo mucho más importante —la investigación contra Pedro, su principal adversario. Para Damián, el supuesto sabotaje que ha sufrido la empresa y la desaparición de Agor Ruiz no son hechos aislados, sino piezas clave de un entramado oscuro con Pedro en el centro.
Ambos coinciden en que Agor probablemente fue comprado por Pedro para desaparecer, lo cual complica el rastreo de pruebas. Andrés intenta obtener información a través de Irene, pero ella se muestra evasiva, sin proporcionar datos útiles, lo que refuerza la sospecha de que algo más grande se está ocultando.
En un momento cargado de emoción, Damián lanza una acusación directa y sin tapujos: Pedro mató a Jesús. Aunque no tiene pruebas materiales, Damián asegura que su convicción es absoluta, que lo siente con cada fibra de su ser. Cree que Jesús, su hijo, descubrió los planes de Pedro para apoderarse de la empresa, y eso lo convirtió en un obstáculo que debía ser eliminado. La rabia de Damián es profunda y visceral, al punto de declarar que no descansará hasta ver a Pedro pagar por lo que hizo.
Andrés intenta apelar a la razón: lanzar una acusación de asesinato sin pruebas podría volverse en su contra. Le recomienda actuar con cautela, reunir evidencias concretas y evitar caer en errores que podrían comprometer aún más su causa. No obstante, Damián está cegado por el dolor y la sed de justicia. La sola idea de Pedro acercándose a Digna o tomando el control de la empresa lo enferma.
En un giro estratégico, ambos consideran que Irene podría ser la clave para derribar a Pedro desde dentro. Aunque ha mostrado lealtad a su hermano, creen que su reciente conflicto con Fermín podría hacerla dudar y generar una grieta aprovechable. Damián sostiene que Irene desea librarse de la sombra de Pedro, y ese deseo podría ser utilizado para acercarse a ella y obtener la información que necesitan.
Este episodio deja claro que la guerra entre Damián y Pedro ha alcanzado un nuevo nivel. Lo que antes eran diferencias ideológicas o personales, ahora se han transformado en acusaciones de asesinato, chantajes emocionales y una caza implacable por la verdad. El duelo entre ambos promete arrastrar a varios personajes más al centro del conflicto, donde la lealtad, el miedo y la venganza marcarán el destino de todos.
Con la desaparición de testigos clave, la desconfianza en aumento y las heridas del pasado aún abiertas, Sueños de Libertad se adentra en una fase más oscura, donde la búsqueda de justicia puede cruzar fácilmente la línea hacia la obsesión. ¿Logrará Damián descubrir la verdad sin destruirse a sí mismo en el proceso? ¿Se revelará la verdadera causa de la muerte de Jesús? ¿Y cuánto tiempo más podrá Pedro mantener su fachada? Todo apunta a que la verdad está cada vez más cerca… y nadie saldrá indemne.
