⚠️ SPOILER ALERT
UNA PROPUESTA DOLOROSA PARA CATALINA Y ADRIANO – La Promesa Capítulo Review | Serie #LaPromesa – YouTube
En el episodio 606 de La Promesa, la tensión se intensifica cuando Catalina y Adriano se ven forzados a aceptar una humillante propuesta: pedir al duque que apadrine a sus hijos en el bautizo. A pesar del desprecio que ambos sienten por él, terminan accediendo por conveniencia y presión social. Esta decisión, especialmente dura para Adriano, marca un punto clave de sumisión ante Leocadia, quien, con ambiciones desmedidas, continúa manipulando el entorno para convertirse en la figura central del palacio, cuya administración sigue siendo un desastre tras múltiples ruinas financieras.
Mientras tanto, otras tramas evolucionan con ritmos dispares. La historia de Rómulo y Emilia, aunque entrañable y ambigua, da señales de quedar colgada, como ocurrió con la precipitada salida de Ana. Del mismo modo, el conflicto entre Samuel y María, en torno a una amonestación que podría terminar en excomunión, apenas avanza, diluyéndose en diálogos repetitivos. María Fernández, además, muestra una actitud inesperadamente hostil hacia Petra, rompiendo con la esencia solidaria que caracterizaba su personaje.
Catalina, por su parte, ha perdido la fuerza de sus primeras apariciones. Ya no es la mujer determinada de los inicios, y su evolución parece haber quedado estancada tras su romance con el conde. Adriano sigue siendo el mismo, pero ella ya no encaja con aquella versión de sí misma. Esta desconexión se suma al desdibujamiento de otros personajes centrales como Manuel, cuya falta de propósito y liderazgo pesa cada vez más en el relato.
En paralelo, Lorenzo y Leocadia continúan su siniestro plan para desestabilizar mentalmente a Eugenia, una víctima inocente que ha sufrido constantes abusos sin haber cometido maldad alguna. A diferencia de otros personajes con historias de redención (como Feliciano o Hann), Eugenia solo ha sido una pieza frágil en manos de personajes despiadados. El destino trágico que le espera, revelado en avances futuros, genera indignación y tristeza.

Finalmente, se menciona una nueva trama aún en desarrollo: Manuel empieza a sospechar de Toño, pero su pasividad y la falta de confrontación directa vuelven a evidenciar la debilidad narrativa de su personaje. En contraste con figuras fuertes del pasado como Cruz o Hann, Manuel no logra cargar con el protagonismo que la serie necesita.
En resumen, este episodio combina una propuesta amarga para Catalina y Adriano con un panorama general de tramas que se desinflan, personajes desdibujados y decisiones de guion que frustran al espectador fiel. La serie parece transitar un momento de confusión creativa, donde ni los villanos despiertan admiración ni los héroes evolucionan. A la espera del avance próximo y del desenlace de Eugenia, el futuro de La Promesa parece incierto.