Tasio y Joaquín, a punto de llegar a las manos – Sueños de Libertad
En uno de los enfrentamientos más tensos hasta la fecha, Tasio y Joaquín se ven envueltos en una discusión que roza la violencia física, sacando a relucir viejos resentimientos, egos heridos y heridas no cerradas.
Todo empieza cuando Tasio reprocha a Joaquín que no tiene idea del esfuerzo y la carga que él ha soportado en los últimos tiempos. Joaquín, visiblemente molesto, decide hablar claro y le recuerda un dato clave: fue él quien dirigió el exitoso lanzamiento del perfume “Anhelos de Mujer”. Ese éxito, afirma, es la razón por la cual don Pedro ahora confía en él para liderar el nuevo proyecto de Galerías Miranda.
La mención del robo de las muestras de perfume en una furgoneta sirve como detonante. Tasio insinúa que todo este enredo no es más que una excusa para que Joaquín gane puntos y se quede con todo el mérito. Joaquín lo acusa de estar celoso porque ya no es él quien tiene el control de los proyectos más importantes.
La conversación escala rápidamente cuando Joaquín le lanza en cara que fue gracias a él que Tasio fue nombrado director, recordándole que su voto fue decisivo. Pero lejos de calmarse, la tensión aumenta con acusaciones mutuas de favoritismos, de haber heredado cargos por influencias familiares, y de arrogancia.

En el punto más crítico, Joaquín y Tasio están a un paso de llegar a los golpes. Tasio pierde la paciencia y agarra a Joaquín, quien se ve obligado a pedir que lo suelte. Afortunadamente, la situación no pasa a mayores, pero el clima que queda entre ellos es explosivo.
Ambos dejan claro que la rivalidad personal ha contaminado por completo su relación profesional, y que cualquier intento de reconciliación parece ya imposible. Lo que antes fue una alianza clave en la empresa, ahora es una bomba a punto de estallar… y puede que el negocio termine pagando las consecuencias.