Título: Un oscuro enfrentamiento entre Curro y su más peligroso enemigo | La Promesa

En el capítulo más reciente de La Promesa, una escena cargada de tensión y amenaza revela la verdadera dimensión del odio que habita entre algunos de los personajes que comparten techo en el palacio. Esta vez, la historia gira en torno a un inquietante enfrentamiento entre Curro y uno de sus enemigos más feroces: don Lorenzo. La atmósfera está impregnada de peligro desde el primer momento.

Todo comienza de forma aparentemente inofensiva, cuando don Lorenzo llama a Curro con la excusa de que va a salir a montar por la finca. Aunque Curro, con su habitual disposición, responde que dará aviso a los mozos para que preparen su montura, don Lorenzo deja claro que no necesita ayuda para eso. Lo que quiere de él es algo muy distinto: que lo ayude personalmente a vestirse y a ponerse las botas. Curro, algo incómodo por la petición, intenta excusarse diciendo que está cumpliendo una tarea encargada por el señor Ballesteros. Incluso sugiere avisar a Santos, pero don Lorenzo corta cualquier objeción de raíz. Lo quiere a él, personalmente.

La conversación rápidamente toma un giro más oscuro. Don Lorenzo le lanza una advertencia velada a Curro: no conseguirá que lo reemplacen por otro lacayo. Está decidido a mostrarle cuál es su lugar, aunque sea “arrodillado”. Curro intenta mantener la compostura, pero lo que sigue deja en evidencia que se enfrenta a un hombre dispuesto a humillarlo y manipularlo sin escrúpulos.

Cuando Curro dice que irá a preparar el dormitorio, don Lorenzo lo detiene. No ha terminado con él. Aprovecha ese momento para tocar otro asunto pendiente. Con tono cruel, le suelta sin rodeos que la mejor ayuda que podría prestarle es “hacer su petate y largarse del palacio”. Con cinismo, tira un objeto al suelo y le ordena a Curro que lo recoja, como símbolo de su supuesta superioridad.

Pero lo peor está por venir. Don Lorenzo revela que, aunque sabe que Curro tiene la protección del marqués, no está dispuesto a rendirse. Asegura que está “resignado” a tenerlo dentro del palacio, pero al mismo tiempo lanza una amenaza directa: lo tiene “en el punto de mira”. Este comentario gélido sugiere que planea algo mucho más oscuro. La guerra apenas ha comenzado, y don Lorenzo está decidido a ganarla, batalla tras batalla.

Curro, a pesar del miedo y la humillación, intenta mantenerse firme. Le deja claro que no le agrada y que el sentimiento es mutuo. Pero don Lorenzo lo hiere donde más duele: en su infancia. Lo acusa de haber sido siempre un niño débil, llorón y necesitado de afecto, que siempre buscaba el cariño de los demás sin conseguir más que desprecio. La crueldad de sus palabras no conoce límites.

Con burla, le pregunta si va a llorar, remarcando que no ha cambiado nada desde entonces. Finalmente, se quita la máscara y le recuerda que él es un hombre muy peligroso, que no lanza amenazas en vano y que cuando alguien lo afrenta, responde con contundencia. Lo insta a que se ande con cuidado, advirtiéndole que podría enfrentarse a algo peor que un simple despido.

Curro, visiblemente afectado pero decidido a no ceder del todo, mantiene su profesionalismo. Acepta la amenaza sin responder y se dispone a preparar el cuarto y todo lo necesario para que don Lorenzo salga a montar. Antes de retirarse, su agresor le recuerda que deje todo como lo encontró. La escena termina con una música que intensifica el peso de lo vivido, dejando claro que esta no será la última confrontación entre ambos.

Este perturbador momento es una muestra más del tipo de relaciones peligrosas y complejas que se viven dentro de La Promesa. La tensión acumulada en este episodio deja a los espectadores con el corazón en un puño, mientras se preguntan hasta dónde está dispuesto a llegar don Lorenzo para deshacerse de Curro. ¿Podrá el joven resistir la presión y encontrar aliados que lo protejan? ¿O caerá víctima de las intrigas de su enemigo más cruel?

La guerra está declarada, y este capítulo marca un antes y un después en la lucha de Curro por mantenerse a salvo en un mundo lleno de traiciones, secretos y amenazas que acechan desde las sombras.