🔔 SPOILER | AVANCE DE UNA NUEVA VIDA – Capítulo 64: Un reencuentro lleno de dudas | Antena 3 España
El capítulo 64 de Una nueva vida arranca con un recuerdo desgarrador de Ferit, quien hace dos años observaba a Suna con la esperanza de reencontrarse con Seiran. “¿Aún quiere verme?”, preguntaba, desesperado por volver a tenerla cerca. Pero todo se derrumba al verla en compañía de Sinan. Seiran, radiante, sonreía como no lo hacía desde hacía tiempo, y Ferit no podía evitar preguntarse por qué esa alegría ya no era para él.
Suna intenta explicarle que Seiran y Sinan comparten algo profundo: heridas, miedos, esperanzas. “Se entienden”, le dice con calma. Ferit, sin poder aceptar que Seiran haya seguido adelante, insiste en hablar con ella. Pero Suna, firme, se interpone. “Si quisiera verte, ya te habría buscado”, le asegura. Él insiste en que no puede olvidarla, que la ama con desesperación, pero Suna lo enfrenta: “Si tuviera que elegir, siempre sería por mi hermana”. Hundido, Ferit se aleja.
En el presente, Ferit y Seiran vuelven a encontrarse, después de dos años, un mes y once días. Ferit no puede ocultar la emoción al verla de nuevo. Sinan aparece a su lado justo cuando Ferit intenta acercarse. Ella, algo nerviosa, admite haberlo visto y lo invita a quedarse un rato. Aunque dice que solo quiere entregar un regalo, Seiran lo convence de quedarse, lo que despierta un torbellino de emociones en ambos.
Durante la boda, Sinan sorprende a Ferit pidiéndole que sea testigo del enlace. Aunque dudoso al principio, Ferit acepta. La tensión se palpa en el aire, los murmullos sobre su presencia llenan el salón. Seiran, mientras tanto, intenta mantener la compostura, pero ver a Ferit otra vez remueve emociones que creía dormidas.
Más tarde, Sinan intenta reafirmar su conexión con Seiran, pero sus palabras revelan inseguridades. “Desde ayer dices que me amas demasiadas veces. ¿Intentas convencerme a mí o a ti misma?”, le pregunta con voz suave pero cargada de duda. Seiran, sin respuesta clara, queda atrapada entre lo que siente y lo que debería sentir.
Mientras tanto, Suna y Abidin pasan su primera noche como esposos. Aunque intentan disfrutar del momento, la tensión se cuela en los pequeños gestos. Suna, inquieta, sale de la habitación y se topa con Setki, quien aparece para reclamarle un dinero prometido. La amenaza es clara: si no cumple, le contará todo a Abidin. Aunque Suna intenta mantenerse firme, el miedo comienza a colarse en su mirada.
De vuelta en casa de Seiran, el ambiente también es tenso. Su madre la enfrenta directamente: “Perdiste el control al ver a Ferit”, le reprocha. Seiran intenta justificar sus emociones, pero su madre le lanza una advertencia: “Si tienes dudas, abandona tu decisión ahora”. Las palabras calan hondo.
Sinan, por su parte, también enfrenta una discusión con su madre. Ella le reclama haber mentido sobre Seiran, recordándole que fue ella quien protagonizó un escándalo mediático. Sinan intenta defenderla, asegurando que Seiran ha cambiado, que ha sufrido demasiado para su edad, pero su madre no cede.
En una escena más íntima, Seiran conversa con su tía, quien nota algo diferente en ella. “Tus ojos brillan de nuevo”, le dice con ternura. Al hablar de Sinan, Seiran responde con una sonrisa tímida: “Es alguien que me da aliento”. Pero el recuerdo de Ferit sigue latente, especialmente al saber que está bajo presión para salvar su empresa.
Y no está equivocada. Ferit ha caído de nuevo en viejos hábitos. La noche anterior, fue encontrado por Dillar borracho junto a unos contenedores. A la mañana siguiente, ella lo encara con rabia y decepción. “Llevabas un año y medio sobrio. Dijiste que no volverías a beber”. Ferit apenas puede sostenerle la mirada. Dillar, dolida, le recuerda que sus padres murieron por culpa del alcohol. “Eso era mi límite, Ferit”, le dice con voz quebrada. Ferit, avergonzado, solo puede prometer que no volverá a pasar.
El episodio cierra con un sentimiento de fragilidad emocional flotando en el aire. Reencuentros cargados de tensión, promesas tambaleantes y corazones divididos entre el pasado y el presente. Las dudas se multiplican, y aunque el destino parece querer unir lo que el tiempo separó, las heridas aún abiertas amenazan con romper lo que queda de sus vidas.
El reencuentro entre Ferit y Seiran, lejos de ser un cierre, abre más preguntas que respuestas. ¿Podrán superar el dolor y las decisiones del pasado? ¿Se mantendrán fieles a sus nuevas relaciones o sucumbirán a lo que aún sienten? La historia apenas comienza a escarbar en lo más profundo de sus corazones…