SPOILER: Avance de La Promesa – Martes 24 de junio de 2025

En el capítulo del martes 24 de junio, las tramas de La Promesa se tensan cada vez más, con conspiraciones, estrategias familiares y decisiones que comienzan a cambiar el rumbo de varios personajes clave.

Ángela, la joven hija de doña Leocadia, se encuentra en una situación cada vez más asfixiante. Tras ser asignada como asistente personal de Lorenzo —más conocido como el Capitán Garrapata— empieza a sospechar que este movimiento no es casual. Las tareas absurdas, el ambiente de tensión constante y el control férreo de Lorenzo parecen tener un único objetivo: forzarla a abandonar el palacio. Ángela cree que su madre, Leocadia, está detrás de esta jugada, decidida a sacarla del camino con métodos encubiertos.

Quien no está dispuesto a permitirlo es Curro, que reacciona con furia al enterarse de lo que está ocurriendo. Sin dudarlo, confronta a Lorenzo directamente y, al mismo tiempo, le pide a Martina que permanezca alerta, cuidando de Ángela para asegurarse de que nadie cruce una línea peligrosa. El ambiente entre ellos se vuelve cada vez más denso, y la joven vive bajo una tensión creciente.

Mientras tanto, la gran fiesta en honor a Adriano se convierte en el foco principal del capítulo. Lo que inicialmente se presentó como un evento para celebrar su reciente título nobiliario, pronto revela tener una intención mucho más estratégica. Rómulo, siempre atento a los detalles, le confiesa a Manuel que el verdadero propósito del evento no es solo rendir homenaje a Adriano, sino también presentarlo formalmente ante la alta sociedad, incluyendo una posible candidata a esposa, acorde a su nuevo estatus.

Esta revelación deja a Manuel profundamente inquieto. Para él, no es una iniciativa de su padre Alonso, quien se mantiene al margen de muchas decisiones últimamente, sino una maniobra bien calculada por Leocadia, quien parece estar utilizando cada situación a su favor. Las sospechas de Manuel sobre su madrastra se hacen más intensas, especialmente al ver cómo se están tomando decisiones importantes sin consultar a la familia directa.

Por otro lado, Catalina y María Fernández se encargan de preparar a Adriano para la velada, enseñándole normas de etiqueta, comportamiento aristocrático y cómo desenvolverse en ese mundo que le resulta totalmente ajeno. A pesar de sus esfuerzos, Adriano no logra sentirse cómodo; se siente como un extraño dentro de su propio entorno, empujado hacia una realidad que no ha elegido. Esta incomodidad —lejos de ser un contratiempo— podría ser parte del plan de Leocadia y Lisandro para hacer tambalear a la familia desde dentro, acelerando los cambios antes de que puedan ser cuestionados.

En otro rincón de la historia, López, el cocinero con un pasado que esconde vínculos nobles, se muestra cada vez más preocupado por el poder y las intenciones de Lisandro. Convencido de que hay una red de manipulaciones más grande de lo que imaginaba, le pide a Vera que le ayude a conseguir una invitación al palacio de los duques de Carril. López sospecha que solo desde dentro podrá entender lo que realmente ocurre, aunque sabe que la misión está llena de riesgos.

Paralelamente, una carta inesperada llega a manos de López, enviada por Trini, la joven que trabaja en la joyería Job. La misiva habla de hechos alarmantes y parece implicar que la desaparición de Esmeralda, la encargada del establecimiento, no ha sido voluntaria ni accidental. El contenido de la carta inquieta profundamente a López, que comienza a temer lo peor y comprende que la joyería puede estar relacionada con algo mucho más turbio.

Como si todo esto no fuera suficiente, uno de los momentos más tensos del capítulo lo protagoniza Petra Arcos, quien retorna a su puesto como ama de llaves con una energía avasalladora. Su regreso no es bien recibido por gran parte de la servidumbre, especialmente por María Fernández, quien sospecha que Petra ha vuelto aliada con Leocadia. Y no se equivoca. Apenas reinstalada, Petra recibe el apoyo explícito de doña Leocadia, quien ya le tiene preparada una misión confidencial que pondrá a prueba su fidelidad.

La relación entre Petra y María se torna hostil casi de inmediato, y la tensión estalla cuando Petra defiende abiertamente a Samuel durante una acalorada conversación. María no solo se siente traicionada por el gesto, sino que comprende que Petra no ha vuelto a La Promesa en son de paz, sino con intenciones claras de influir y dividir.

Y como broche del episodio, se desarrolla uno de los momentos más íntimos y decisivos: Manuel, quien hasta ahora había evitado todo lo que viniera de Cruz, su madre encarcelada, decide finalmente leer una carta enviada por ella. La lectura del mensaje le abre los ojos. Por primera vez, empieza a reconocer el modo en que Leocadia ha ido ocupando el lugar de su madre, manipulando su entorno, sus decisiones y hasta los vínculos más personales de su vida.

Este gesto, aparentemente pequeño, marca un cambio profundo en Manuel. Comienza a sentirse preparado para enfrentar la verdad, para investigar, entender y, si es necesario, defender lo que realmente le pertenece, aunque eso implique enfrentarse a Leocadia en un conflicto inevitable.

Este episodio del martes 24 de junio de 2025, por tanto, consolida varias líneas argumentales clave: el enfrentamiento entre madre e hija, la manipulación dentro de la nobleza, las alianzas en las sombras, y un despertar emocional que podría cambiar el equilibrio de poder en el palacio.

Con una mezcla de tensión, intriga y emociones contenidas, La Promesa sigue su curso como una de las ficciones más intensas de la televisión actual.