Halis es un hombre mayor, herido por sus propias decisiones. Y ahora, quiere recuperar lo único que perdió por orgullo: a su hija.

Durante años, se distanció de su hija y eligió el deber antes que el amor. Pero ahora, cuando la vida se le escapa entre las manos, ha entendido que no le queda mucho tiempo… y que tampoco le queda mucha familia.
Por eso le ha dicho a Nükhet que quiere conocerla de verdad. Que quiere compartir lo que le queda de vida con ella y con Kaya. Que ya no le importa quién manda en la casa, sino quién estará allí cuando ya no esté.