En el episodio 100 de Yalı Çapkını, la tensión alcanza su punto máximo cuando Ferit, tras una serie de eventos que lo llevan a enfrentarse a Tarık, decide tomar cartas en el asunto de una manera drástica. La historia comienza con una atmósfera de celebración en la mansión Korhan, donde la familia se reúne para conmemorar la graduación de Duru. Sin embargo, la alegría se ve empañada cuando se descubre que Duru y Hatice han desaparecido. La familia entra en pánico y la policía comienza una investigación para localizarlas.
A medida que avanzan las investigaciones, se revela que Tarık y Saffet están involucrados en el secuestro de las niñas. Ferit, decidido a salvar a su hija, localiza a Tarık y lo enfrenta. En un momento de confrontación, Ferit, lleno de ira y desesperación, golpea a Tarık, dejándolo inconsciente. Sin embargo, la situación da un giro inesperado cuando Tarık, al recuperarse, secuestra a Ferit y lo encierra en una cámara frigorífica, dejándolo a merced del frío extremo.

Mientras Ferit lucha por mantenerse consciente y con vida, la familia Korhan, liderada por Seyran, intensifica sus esfuerzos para rescatarlo. Finalmente, con la ayuda de la policía, logran localizar a Ferit y liberarlo. Aunque gravemente afectado por el frío, Ferit sobrevive, y la familia se reúne para apoyarlo en su recuperación.
Este episodio marca un punto de inflexión en la serie, mostrando la determinación de Ferit para proteger a su familia y la profundidad de la enemistad entre él y Tarık. La tensión entre ambos personajes alcanza su clímax, dejando abierta la posibilidad de futuras confrontaciones que podrían alterar el equilibrio en la familia Korhan.