🧨 Spoiler – Leocadia contraataca: el regalo envenenado de Lisandro lo cambia todo
En el explosivo capítulo 616 de La Promesa (lunes, 16 de junio), los secretos hierven, las lealtades se quiebran y las máscaras caen. Lisandro entrega a Adriano y Catalina un título nobiliario —el Marquesado de Luján— que desata un terremoto en el palacio. Leocadia, humillada y furiosa por quedar fuera de esta jugada, jura contraatacar. Pero no cuenta con que su hija Ángela tiene su propio plan: su supuesto viaje a Zúrich es en realidad una huida encubierta hacia una nueva vida en Lisboa, lejos del control materno.
Mientras tanto, la tensión sube con el hallazgo más inquietante del capítulo: una pulsera con cianuro escondido, señal de un intento de asesinato encubierto. Curro, Pía y Lope, decididos a llegar al fondo del misterio, preparan una incursión a la joyería Llop para descubrir quién está detrás del mortal encargo.
En otro frente, Jacobo estalla de celos al ver cómo su cuñado Adriano recibe el título que él tanto anhelaba. La confrontación entre ambos deja al descubierto heridas profundas, anhelos no cumplidos y una rabia que podría convertirse en traición.
A la sombra de los salones, María Fernández exige justicia por el padre Samuel, apuntando con valentía contra el traidor oculto entre los muros de La Promesa. Rómulo y Emilia, por su parte, preparan su fuga silenciosa, decididos a abandonar el palacio para vivir su amor en libertad.
Y en medio de todo, Manuel, atrapado entre su pasado con Jana y su futuro incierto, firma la venta de sus motores, cerrando una etapa vital con melancolía.
Cada línea de este episodio dibuja un nuevo límite entre la lealtad y la traición, el amor y la renuncia, la ambición y el peligro. La Promesa arde bajo la superficie… y cuando la verdad estalle, nadie saldrá ileso.