‘La Promesa’, avance semanal del 28 al 2 de mayo: La amenaza de Leocadia y el regreso de Eugenia
Spoiler:
La semana en La Promesa promete ser una auténtica tormenta emocional. El regreso de Eugenia, la misteriosa esposa de Lorenzo y hermana de Cruz, desata una cadena de revelaciones que sacude los cimientos del palacio. Su aparición, más que una sorpresa, parece una jugada calculada de Ayala que pondrá a Lorenzo al borde del colapso. Su sola presencia obliga a todos a replantearse sus secretos y estrategias.
Mientras tanto, Martina, decidida a conocer la verdad sobre su origen, desafía a su familia visitando a Cruz en prisión. Este acto genera un conflicto explosivo con Alonso, quien ve tambalearse la ya frágil unidad de los Luján. La joven confiesa que Cruz sabe quién es su verdadero padre, una revelación que deja a la familia completamente descolocada.
En paralelo, la amenaza silenciosa de Leocadia cobra protagonismo. Su presencia inquietante y sus evasivas respuestas ante Ángela alimentan la sospecha de que esconde secretos que podrían cambiar la historia de Curro para siempre. Este último, junto a Pía, continúa con la arriesgada investigación sobre la muerte de Dolores, cada vez más convencidos de que Lorenzo está detrás del crimen.
La tensión escala aún más cuando Catalina comunica su decisión de casarse con Adriano, pese a la oposición de Alonso. Aunque inicialmente el marqués cede, la presión de Leocadia y su preocupación por el caos familiar lo llevan a cancelar el enlace, sumiendo a Catalina en la frustración y en un nuevo enfrentamiento con su padre.
Petra, por su parte, empieza a mostrar un lado inesperado. Gracias al apoyo de Samuel, su coraza empieza a resquebrajarse, revelando una sensibilidad que nadie imaginaba. Su vínculo con Alicia, una joven en silencio desde hace meses, permite ver en ella una posibilidad de redención. Pero su reciente interés en ocupar un puesto en la panadería, a espaldas de Rómulo, genera nuevas dudas sobre sus verdaderas intenciones.
En las cocinas, Toño y Simona atraviesan una dolorosa crisis. Las heridas del pasado y la incomprensión entre madre e hijo parecen imposibles de sanar. Emilia intenta intervenir con cariño, pero ambos parecen cada vez más distantes. A la vez, la enfermera también debe lidiar con los fantasmas de su relación con Rómulo, a quien enfrenta por los sentimientos nunca resueltos entre ambos. Rómulo confiesa que se alejó por protegerla, aunque todavía hay peligros que los acechan desde las sombras del palacio.
Manuel también se enfrenta a Alonso, cuestionando la hipocresía del marqués al permitir el matrimonio de Catalina pero haber prohibido su relación con Jana. La tensión padre-hijo escala a niveles peligrosos, marcando una grieta aún más profunda entre ellos.
Mientras tanto, Eugenia se convierte en el centro de una red de mentiras. Alonso obliga a todos a protegerla de la verdad, alegando que su salud no resistiría la tensión. Pero Eugenia, intuitiva, siente el peso de los secretos que la rodean. Curro, cada vez más implicado emocionalmente con ella, le pregunta directamente por su relación con Ayala. Eugenia revela que el capitán guarda secretos devastadores sobre Lorenzo que podrían destruirlo.
La situación se complica aún más cuando Eugenia se convierte en un apoyo emocional fundamental para Curro, quien encuentra en ella una figura casi materna. Esto fortalece su determinación para descubrir la verdad sobre Dolores y sobre su propio origen. En paralelo, Ángela intenta sonsacar a Leocadia información clave, pero la mujer sigue esquiva, dejando claro que proteger a Lorenzo podría ser su prioridad.
Catalina, al borde de la desesperación por la decisión de Alonso de cancelar su boda, está dispuesta a enfrentarlo con determinación. Mientras tanto, Martina intenta recuperar la confianza de sus primos, especialmente la de Manuel, quien la acusa de actuar a espaldas de la familia. Su relación queda rota, y Martina empieza a asumir el precio de su búsqueda por la verdad.
El marqués, en su soledad, se cuestiona si su rigidez ha destruido lo que más amaba: su familia. Contemplando una vieja fotografía, se da cuenta de cuánto ha sacrificado en nombre del poder.
Y en medio de todo, el caos crece. Eugenia, frágil pero perceptiva, empieza a intuir que su regreso no fue un acto inocente. Curro, apoyado por ella, se siente más fuerte, aunque cada paso lo acerque al peligro. Petra sigue sorprendiendo, demostrando que incluso los corazones más duros pueden cambiar.
Al finalizar la semana, La Promesa se tambalea al borde del abismo. Secretos largamente ocultos están a punto de salir a la luz. Cada personaje enfrenta decisiones difíciles, y el precio de la verdad, del amor y de la lealtad podría ser devastador. Lo único claro es que nadie saldrá ileso, y el futuro del palacio pende de un hilo cada vez más fino.