🟥 SPOILER | Leocadia: El Rostro de la Traición – El Día que La Promesa Descubrió la Verdad
En un giro inesperado dentro de los muros de La Promesa, la aparente benefactora Leocadia se revela como una figura de doble filo. Mientras el palacio aún lidia con la ausencia de la marquesa Cruz, Leocadia gana terreno con regalos artísticos y un aire de generosidad que logra cautivar al vulnerable marqués Alonso. Sin embargo, su encantadora presencia oculta una ambición fría: despojar a los Luján de poder.
Aunque Alonso cae en su red y llega incluso a proponerle matrimonio, su hijo Manuel no está convencido. En una tensa conversación, Manuel intenta abrirle los ojos a su padre, alertando sobre las verdaderas intenciones de Leocadia. Alonso, cegado por la necesidad de compañía, desestima las advertencias y confirma su compromiso con ella.
Pero el destino da un vuelco inesperado gracias a Ángela, la hija de Leocadia. Al descubrir inscripciones ocultas en las molduras de los cuadros, Ángela revela que las valiosas obras traídas por su madre no son simples obsequios… sino arte robado, proveniente de una colección dada por perdida tras un incendio en Madrid. Con esta revelación, la máscara de Leocadia comienza a desmoronarse.
El salón principal se convierte en un tribunal improvisado. Criados, familiares y el marqués asisten atónitos a la confrontación. Alonso, horrorizado, exige respuestas. Leocadia, acorralada, intenta justificarse como coleccionista, pero las pruebas son irrefutables. El prestigio de La Promesa ha sido manchado por una estafa orquestada desde dentro.
Así, el plan meticuloso de Leocadia colapsa en cuestión de minutos, desatando consecuencias irreversibles. El mismo lugar donde creyó haber alcanzado la gloria se convierte en escenario de su caída.