SPOILER: “MARTA AND FINA – Sueños de Libertad 299 (Manuela se preocupa por Damián y le ofrece su ayuda)”
En el episodio 299 de Sueños de Libertad, Manuela se muestra muy preocupada por la salud de Damián y, con un gesto cariñoso, le ofrece prepararle una manzanilla. Sin embargo, Damián, aunque agradecido, rechaza la oferta con amabilidad, asegurando que se encuentra bien. A pesar de la negativa, Manuela le expresa que solo dejará de preocuparse por él si él también lo hace, destacando que siempre puede notar cuando Damián está inquieto, incluso mencionando que le arde el estómago. Esto revela que, aunque lleva poco tiempo trabajando en la casa, Manuela ha estado muy atenta a su bienestar.
Damián, algo sorprendido por la percepción de Manuela, le comenta que, curiosamente, ella parece entenderlo mejor que su propia familia. Intrigado, le pregunta cómo lo ve. Manuela, aunque inicialmente intenta evadir la pregunta, finalmente responde con sinceridad. Le dice que lo ve como un hombre trabajador, luchador y muy familiar. Estas palabras conmueven profundamente a Damián, quien, con un tono preocupado, le pregunta si acaso ha dicho algo que la haya incomodado. Manuela le aclara que no, pero Damián aprovecha la ocasión para abrirse un poco más y compartir una de sus mayores tristezas: lo que más le duele es que su familia siempre lo ha considerado egoísta, como si él estuviera poniendo los intereses de la empresa por encima de su vida familiar.
Manuela, con respeto y mucha empatía, le interrumpe para decirle que, con todo el respeto, su familia está equivocada. Según lo que ella ha podido observar desde que trabaja allí, Damián es, en realidad, el pilar de la casa, siempre pendiente del bienestar de todos y haciendo todo lo posible por mantener unida a su familia. Damián, con una expresión de tristeza, le responde que eso lo dice porque no conoce toda la historia. Él mismo reconoce que ha cometido errores graves e imperdonables y que ha perdido cosas irrecuperables a lo largo de su vida. Manuela, con ternura, le responde que nada en la vida es para siempre, a menos que se refiera a sí mismo o a su difunta esposa.
