MARTA AND FINA – Sueños de Libertad 311 (¿Vender o no vender? La decisión que enfrenta María🔥🔥)
En el episodio 311 de Sueños de Libertad, las tensiones alcanzan un nivel máximo cuando María y Andrés tienen una conversación crucial sobre el futuro de las acciones de Julia y el futuro del negocio familiar. La conversación comienza con una fuerte carga emocional cuando María le revela a Andrés que ha estado en negociaciones con Irene Carpena sobre una propuesta económica que su hermano le hizo para comprar las acciones de Julia, las cuales son clave en el futuro de la empresa familiar.
María explica que esta propuesta es extremadamente atractiva, tanto que supera incluso la oferta de los inversores franceses, aunque también espera que estos la igualen en los próximos días. Lo único que le interesa, según ella, es asegurar el bienestar de su hija Julia, quien se beneficiaría enormemente de esta venta, ya que cuando llegue a la mayoría de edad podría utilizar ese dinero fuera del negocio familiar. Esta independencia financiera le daría a Julia más libertad en el futuro, algo que María considera vital para su hija, especialmente ante la inestabilidad que podría traer el continuar con la empresa familiar.
Andrés, aunque escucha atentamente, no está completamente convencido de la decisión. Le responde que Julia ya tiene su futuro asegurado de alguna forma y que el negocio familiar ha superado muchas dificultades en el pasado. Sin embargo, María le responde que el éxito no está garantizado en el futuro y que tener el dinero fuera del negocio podría evitarle problemas a Julia más adelante, ofreciéndole una seguridad que no puede ofrecerle el entorno del negocio.
María va más allá y revela que la oferta de Pedro es considerablemente superior al valor real de las acciones de Julia, lo que hace que esta propuesta sea aún más tentadora. Andrés, preocupado por las implicaciones de esta decisión, le ruega que no venda las acciones ni a Pedro ni a los inversores franceses. Aunque reconoce que está en una posición difícil, le pide que reflexione cuidadosamente antes de tomar una decisión tan importante.
A pesar de las súplicas de Andrés, María se mantiene firme en su postura. Asegura que tiene razones muy poderosas para tomar esta decisión, dejando claro que está haciendo esto por el bienestar de Julia, no solo por dinero o poder. Y, como si la situación no fuera lo suficientemente tensa, María plantea un trato. Su propuesta es tajante: no venderá las acciones si Andrés acepta una condición que parece aún más personal. Le exige que saque a Begoña de la casa. Para María, Begoña es el centro de su infelicidad, y su presencia en la vida de Julia y en la casa familiar es algo que debe eliminarse si quiere que las cosas se arreglen.

La acusación de María no es fácil de digerir para Andrés, quien se siente atacado, pero a la vez reconoce que está ante una situación en la que las emociones están a flor de piel. Andrés acusa a María de querer vengarse de Begoña, y le lanza una frase cargada de reproche, llamándola el “demonio”. Sin embargo, María no se deja amedrentar. Se mantiene firme en su postura, dejándole claro que si realmente quiere lo mejor para Julia, tiene que tomar una decisión difícil: o acepta su propuesta o perderá la oportunidad de asegurar el futuro de su hija de la forma en que ella lo ve.
El episodio culmina con María dejando a Andrés frente a una encrucijada. Su propuesta es clara: o acepta que Begoña se aleje, o ella venderá las acciones de Julia, cerrando así un capítulo crucial en la trama. La tensión está al máximo, y el futuro del negocio, así como las relaciones familiares, están en juego.
Este episodio pone a prueba la lealtad, el amor y la capacidad de sacrificio de los personajes. La decisión que enfrenta María no solo tiene implicaciones económicas, sino que está profundamente marcada por sus emociones personales, sus conflictos con Begoña y su deseo de proteger a su hija a toda costa. La situación no se resuelve fácilmente, y los espectadores quedan en vilo, preguntándose qué camino tomará Andrés y si su amor por Julia será suficiente para que acepte la dolorosa condición de María.