Spoiler: Una Nueva Vida 39: Guerra en la familia Korhan: Una bofetada, una rebelión y el inicio de una nueva era – YouTube

En este episodio, la tensión entre Ferit y su padre, Halis Korhan, alcanza su punto máximo. Tras recibir una violenta bofetada de su padre, Ferit decide que no puede continuar viviendo en la mansión y siente la necesidad urgente de alejarse de su familia. Aunque Seyran intenta detenerlo, al ver la determinación de Ferit, decide apoyarlo en su decisión. Mientras Ferit recoge sus pertenencias, la mansión queda sumida en un tenso silencio, pero no por mucho tiempo. Halis, enfurecido, lanza duras palabras a los miembros de la familia, que permanecen callados, con excepción de Orhan. Este se enfrenta a su padre y le dice que ya no tolerará su actitud autoritaria. Esta confrontación sacude los cimientos de la familia Korhan, y por primera vez, Orhan se aleja de la casa.

La furia de Halis crece, pero a pesar de sus intentos de callar a Orhan, su hijo se mantiene firme y se va de la mansión. La salida de ambos hijos marca un punto de quiebre en la familia, mientras el resto de los miembros guardan silencio, reflexionando sobre los cambios que se avecinan. En el camino hacia su nueva vida, Ferit siente el peso de lo sucedido, pero es apoyado por Seyran, quien le acompaña en su decisión de irse.

Por otro lado, la familia Korhan no está exenta de más conflictos. Kazım, al ver la situación, se siente obligado a intervenir y comienza a culpar a Seyran, sugiriendo que ha hecho cosas a espaldas de Ferit. Esto provoca una acalorada discusión entre ellos, donde Seyran, frustrada, siente que Ferit no la apoya. En el hogar de Kazım, Seyran se siente cada vez más asfixiada por las exigencias de su suegro, quien le pide que se convierta en una mujer sumisa y que se comporte según las expectativas familiares. Esto lleva a más discusiones, hasta que Suna interviene tratando de calmar los ánimos, recordándoles la importancia de la comprensión mutua, aunque es evidente que la relación de Ferit y Seyran requiere una comunicación más profunda.

Mientras tanto, Nükhet, preocupada por la salud de su esposo Halis, decide intervenir para restaurar el orden familiar. Se da cuenta de la creciente tensión entre Ferit y Kaya, y aunque intenta encontrar una solución, los problemas persisten. Nükhet, con determinación, se propone proteger el equilibrio en la mansión, tomando el control de la situación. Sin embargo, Ferit continúa provocando a Seyran, exigiéndole cosas pequeñas que la estresan aún más. En un momento de tensión, Seyran decide poner límites y le responde con sarcasmo, lo que hiere el orgullo de Ferit y le hace reconsiderar si su estancia en la mansión es viable.

Mientras los conflictos aumentan, Orhan busca distraerse y se acerca a una mujer en un club nocturno, pero su conciencia lo hace regresar a la mansión al amanecer. Dicle, al verlo en ese estado, intenta ayudarlo, pero Sultan la advierte severamente, pidiéndole que se mantenga alejada de Orhan, lo que provoca tristeza en Dicle y la hace cuestionarse sus sentimientos.

Por su parte, Kazım intenta ganarse la confianza de Ferit cocinando una comida, un gesto que sorprende y divierte a Esme y los demás. Aunque Ferit acepta el intento de Kazım por acercarse, Esme y Hattuç dudan de la sinceridad de sus intenciones. Kazım, sin embargo, continúa tratando de encontrar maneras de ganarse la aprobación de Ferit. Mientras tanto, Nükhet sigue trabajando para restaurar el equilibrio en la familia, buscando resolver el conflicto entre Ferit y Kaya. Sin embargo, cuando le sugiere a Kaya que se disculpe con Ferit, la joven se niega inicialmente, pero finalmente cede bajo la presión de su madre.

Nükhet también toma medidas para imponer un control financiero en la mansión, cancelando la tarjeta de crédito de Ferit y limitando las lujosas compras. Estas decisiones generan malestar entre los miembros de la familia, aunque Halis apoya a su esposa en estas medidas. Ferit, por otro lado, ve estas restricciones como una invasión a su libertad, lo que provoca un enfrentamiento con su madre.

El día siguiente llega con una visita inesperada de Nükhet y Kaya a casa de Kazım. Ferit, al creer que Halis está detrás de esta visita, se siente incómodo. La tensión entre Ferit y Kaya es palpable, lo que convierte la visita en un fracaso, ya que no logra apaciguar los ánimos, sino que los intensifica. A pesar de los esfuerzos de Nükhet por reconciliar a las partes, Kaya sale aún más furiosa con Ferit.

Kazım, por su parte, apoya la decisión de Ferit de no regresar a la mansión, sugiriendo que debe valerse por sí mismo y montar su propio negocio. Sin embargo, cuando descubre que Ferit no tiene recursos económicos debido a las restricciones de Halis, le sugiere que reclame lo que le corresponde. Esto motiva a Ferit a regresar a la mansión para exigir sus derechos en la empresa. Seyran, fiel a su marido, decide acompañarlo, aunque en el camino, Ferit se da cuenta de que tiene una cita con el fisioterapeuta y cambia de planes, dejándola continuar sola.

Mientras tanto, Orhan disfruta de un día de compras con Dicle, y poco a poco se va sintiendo atraído por ella. Dicle, al conocer mejor a Orhan, empieza a enamorarse de él, lo que añade complejidad a la situación familiar.

En la clínica, el médico le aconseja a Ferit que evite el estrés, pero Ferit, con sarcasmo, señala que la causa de su estrés es Seyran. Esto desata una fuerte discusión entre ellos, y aunque el médico trata de calmar la situación, el conflicto persiste. De regreso a la mansión, Ferit decide confrontar a su padre para exigir su parte en la empresa, pero Halis le impone una condición: debe regresar a vivir en la mansión si quiere recibir algo. Esto lo pone en una posición difícil, ya que Ferit no está dispuesto a perder su independencia, pero también necesita los recursos económicos.

La confrontación final llega cuando Ferit y Seyran regresan a la mansión, sorprendiendo a todos. Ferit, decidido a recuperar su lugar, anuncia su retorno, y lo hace acompañado de Kazım, quien, respaldado por Hattuç y Esme, llega con paso firme para saludar a Halis. Este giro inesperado marca el inicio de una nueva etapa en la familia, dejando claro que los equilibrios han cambiado y que una gran batalla se avecina.

Este episodio pone en marcha una serie de cambios drásticos dentro de la familia Korhan, con decisiones que afectarán la dinámica familiar para siempre. Las cartas están siendo repartidas de nuevo, y el conflicto por el control de la familia parece no tener fin.