Spoiler: Escándalo, chantaje y enfermedad en “Una nueva vida”

Ferit recibe un mensaje inquietante y se encierra en el baño visiblemente alterado. Suna lo llama para decirle que ha salido por un asunto urgente, pero él le reclama duramente, recordándole el peligro constante que los rodea, y le ordena volver a la mansión inmediatamente. Seirán nota su angustia y le pregunta si todo está bien, a lo que él responde que solo está cansado. Luego llama a Esme y le cuenta a Seirán que su madre vino a apoyarla.

Ferit muestra a Abidín una fotografía escalofriante: un cuerpo enterrado, enviada desde el número de Mecide. En medio de la confusión, descubre que los guardias están viendo en sus móviles un vídeo íntimo de Asuman con un hombre. Aunque el rostro del acompañante está cubierto, Ferit identifica a Doruk, el entrenador de su cuñada. Indignado, insulta a los guardias por compartir ese material y corre a enfrentar a la familia.

Al mostrar el vídeo a Suna, ella queda devastada, al igual que Esme y Gulgun. Ferit acusa a Doruk de difundir el material y no puede contener su ira hacia Asuman, reprochándole haber manchado el honor de la familia y traicionado a su difunto esposo, Fuat. Seirán interviene, defendiéndola y exigiendo respeto, recordando que nadie es perfecto. Jalis entra a escena, igualmente furioso, y desprecia a Asuman por romper su confianza.

Poco después, Jalis llega al punto de escupir a Asuman. Seirán, con valentía, vuelve a intervenir y acusa a la familia de hipócritas, pues si realmente se consideran unidos, deberían apoyar a Asuman en vez de hundirla. Jatice también critica a Asuman, pero Seirán le recuerda que todos tienen errores y que el verdadero culpable, Doruk, aún no ha sido castigado. Finalmente, Jalis expulsa a Asuman de la casa.

Ya fuera de la mansión, Asuman se refugia temporalmente con Ifakat y le pide ayuda. Mientras tanto, Taidiar, el perturbador padre de Akin, mantiene prisionera a Mecide en un escondite rural. Mecide le pide vengar la muerte de su hijo y destruir a los Korhan, y Taidiar acepta.

Ferit, junto a su familia, analiza la foto del cuerpo enterrado y sospechan que Taidiar sigue vivo y está detrás de todo. Le pide a Hatub que investigue más sobre los orígenes de Akin. Mientras tanto, Seirán recibe una llamada de su doctora, quien le dice que sus quemaduras mejoran, pero que los resultados de unos análisis abdominales muestran algo preocupante. Sin contarle a nadie, le dice a su madre que irá al hospital por un chequeo de rutina.

Suna tiene un enfrentamiento con Kaya, quien le reclama por seguir pensando en Abidín, mientras él terminó su relación con Pelin. Esto deja a Suna muy confundida.

Ferit encuentra una cámara escondida en casa de Doruk, la misma que grabó el vídeo íntimo. Doruk lo llama y le exige cinco millones de dólares para borrar el vídeo y eliminar todas las copias. Ferit, aunque indignado, acepta el trato, planeando usar el dinero como cebo.

En otro lugar, Ifakat prepara un plan para limpiar el nombre de Asuman: pagará a una modelo parecida a ella para que desmienta ser la mujer del vídeo y acuse a Doruk de difamación. Planea, además, demandar al medio que publicó la noticia para exigir una indemnización.

Ferit y Abidín hacen la entrega del dinero siguiendo su plan. Un rastreador escondido en los fajos permite seguir al cómplice de Doruk hasta su escondite. La policía interviene y Doruk es capturado. Ferit lo enfrenta, prometiéndole que pagará caro por haber arruinado a su familia.

Seirán, en el hospital, recibe el diagnóstico más difícil de su vida: tiene una rara enfermedad neurológica sin cura que progresivamente deteriorará su cuerpo. El tratamiento puede prolongar su vida unos cuatro años, pero también le impediría ser madre. Desconsolada, sale del consultorio, pero no revela nada a Suna ni Abidín.

Por otro lado, Jalís se encarga personalmente del destino de Doruk. Hace que Asuman lo enfrente en el bosque, donde está atrapado. Le dice que ella decidirá qué hacer con él. Aunque primero se niega, termina asintiendo y los hombres de Jalís ejecutan a Doruk, cerrando así uno de los capítulos más oscuros de su vida.

La historia vuelve con Seirán, quien aún oculta su diagnóstico. Trata de mantenerse fuerte frente a los demás, pero la tristeza la consume en soledad.

En paralelo, Ferit descubre que Taidiar fue paciente de un hospital psiquiátrico y que Akin lo sacó meses atrás. Sin embargo, ni él ni Cín sospechan que el hombre que ahora se hace pasar por chófer y se codea con ellos es en realidad Taidiar.

Finalmente, Ferit encuentra en su auto un frasco con una nota que dice: “Estás en el camino correcto. No permitas que nada ni nadie te confunda”, junto con una contraseña. Todo indica que el juego del enemigo aún no ha terminado.

Así cierra este impactante capítulo lleno de drama, secretos, traición y decisiones que cambiarán la vida de todos para siempre.